¿Qué pasa si mi perro come cebolla?

Ingredientes como el ajo y la cebolla son indispensables en las cocinas alrededor del mundo, con ellos podemos sazonar los alimentos y darles ese extra de sabor que a todos nos encanta, sin embargo, las cosas no son así para los perros que incluso se pueden llegar a intoxicar si los comen.

El caso de las cebollas es muy particular, pues prácticamente se suele poner en todo tipo de alimentos y aunque hay algunos ingredientes que se pueden dar cocidos a los perritos, este no es el caso, así que si sueles darle de tu comida a las mascotas que tienes en casa debes estar muy atento.

Debemos de recordar que lo mejor que le podemos dar de comer a un lomito siempre van a ser croquetas de calidad, ya que estas están formuladas para darles todos los nutrientes que necesitan, además de que evitamos posibles intoxicaciones por ingredientes que parecen inofensivos para los humanos, pero que en ellos causan graves daños.

¿Qué le pasa a mi perro come cebolla?

No importa si es cruda o cocida, la cebolla puede causar una intoxicación en los perros ya que daña la pared celular de los glóbulos rojos generando una “anemia hemolítica” o trastornos gastrointestinales. La reacción no suele ser inmediata, pero después un par de días de comer este ingrediente tan común pueden llegar a presentar letargia, vómitos, diarrea, aumento de la salivación, debilidad o fatiga, dolor abdominal, aumento del pulso y el ritmo respiratorio y mucosas pálidas.

¿Qué hacer si mi perro comió cebolla?

La gravedad de la intoxicación dependerá del tamaño del perro, así como de la cantidad de cebolla que haya ingerido, una primera respuesta puede ser administrar carbón activado para evitar que su organismo absorba las sustancias tóxicas, pero si desarrolla alguno de los síntomas antes mencionados es importante acudir con el MVZ para que comience con un tratamiento de fluidos, suministro de oxígeno y, en los casos más graves, transfusión sanguínea.

¿Cuánto dura la intoxicación por cebolla en perros?

Así como la intensidad de la intoxicación depende de varios factores, lo mismo ocurre con la duración de los síntomas los que pueden mantenerse desde unos días hasta varias semanas, dependiendo de la cantidad ingerida y del tamaño del perro, además de si recibió atención oportuna de un médico.

Lo mejor siempre será la prevención, así que evita darle alimentos preparados a tu perro y en caso de hacerlo evita cualquier tipo de sazonadores, entre ellos la sal, el ajo y la cebolla, pues aunque dan un toque inigualable, al comer estos ingredientes podría sufrir una fuerte intoxicación.