GATOS

5 razones por las que DEBES cepillar a tu gato constantemente

El que siempre hagas esto cinco minutos al día ayudará a la salud de ambos.
martes, 7 de marzo de 2023 · 16:01

Tener un gato en casa es muy bonito. Si corres con suerte será de aquellos que no les afecta demostrar su amor por ti, pero tanto cariño conlleva una gran responsabilidad como la de recoger su arenero, cepillar su pelaje y hacer que tenga una buena salud todo el tiempo.

Y hablando de cepillar, ya sabemos que los animales suelen soltar mucho cabello ya sea por el tipo de alimento que estén comiendo, si tienen alguna enfermedad, si carecen de nutrientes o si es la época de mudar. Incluso puede que suelten más cabello de lo que tú sueles hacer.

Es por esta razón que te la pasas limpiando los muebles, barriendo los cuartos y sacudiendo los sillones porque te topas por doquier el pelo de tu gato. Y es bueno que lo hagas, ya que estas hebras pueden traer consigo infecciones como el Campylobacter. Es por ello que el día de hoy te hablaremos de la importancia que tiene cepillar el pelo de tu gato.

Cepillar a tu gato es beneficioso para su salud y la tuya
Créditos: Pinterest.

¿Por qué debo cepillar a mi gato?

Puede que limpie cada tercer día tu casa y que con ayuda de tu secadora aspires toda esa suciedad acumulada en las esquinas de las paredes, pero si aún no entiendes la importancia de lo que implica en la salud el cepillar el pelo de tu gato, con gusto te explicamos.

  • Casi como acariciar su lomo, el cepillar su pelaje ayuda a mejorar el tono muscular.
  • Como consecuencia estimula la circulación sanguínea mejorando el estado de su piel.
  • Además, elimina la suciedad, la grasa y el pelo muerto.
  • Por cierto, el cepillar a tu gato minimiza el tamaño y cantidad de bolas de pelo en su estómago.
  • Contribuye a mejorar las propiedades de salud en el pelaje de tu gato.
Tu gato puede tener una buena salud siguientes estos pasos al cepillarlo
Créditos: Pinterest.

¿Cómo cepillar a un gato en casa?

No tendrás ningún problema si tu gato es de aquellos que disfrutan de una buena cepillada, pero si no es el caso y no quieres que ni tu salud y ni la de él se vean conflictuada puedes hacer esto: busca un lugar en el que tu gato se sienta con confianza y aprovecha para acariciar sutilmente su lomo para que incorpore con cuidado el cepillo.

Estos movimientos con el cepillo deben ser suaves y largos, no debes tocar la zona de su rostros (en especial los bigotes) ni la zona baja de sus costados, ya que no les suele gustar. También puedes pasarle un paño limpio que solo vayas a usar con él después de cepillarle para retirar todo rastro de pelo suelto o suciedad.

Por último y no menos importante, no olvides limpiar la zona en la que cepillaste a tu gato y todos los utensilios que usaste en él.