Gracias al tiempo de convivencia que tenemos con nuestros animalitos, conocemos sus hábitos y su comportamiento habitual. Si has notado que tu perro se agita sin hacer nada, ni una actividad física, puede ser preocupante. Si es tu caso, te decimos por qué puede darse un jadeo marcado.
En su naturaleza, la sensibilidad es un rasgo marcado de su personalidad. De igual manera que una caricia o palabra puede alegrarlos, un cambio o factor puede hacer que se agite. ¿Por qué?, se debe a un impacto inesperado que lo pone en alerta. En este momento, el nerviosismo e inquietud pueden estar presentes.
Es bueno que te preocupes por la salud del perro y corras al veterinario, hay que revisar por qué se agita, especialmente si ha estado sin hacer nada de ejercicio o una actividad energética. La causa de su malestar puede estar frente a ti, solo necesitas observar su entorno y comportamiento.
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¿Por qué un perro no hace nada pero se agita mucho?
De igual manera que nosotros, nuestro lomito responde a los estímulos del exterior, lo que causa un impacto en las funciones de su cuerpo. El miedo, el estrés o los nervios pueden ser los causantes de un jadeo excesivo en el peludito, que le impida realizar sus acciones con normalidad, incluso conciliar el sueño por la noche.
Un detonante que causa su miedo son los ruidos extraños e intensos, como los fuegos artificiales o el uso de herramientas de alto impacto. Algunos perros con personalidad sensible pueden verse afectados, lo que desencadena un jadeo constante y una sobrecarga sensorial sin sin hacer nada. Si se sobrecarga emocionalmente, puede tener problemas para descansar e incluso lograr conciliar el sueño.
Un miedo común en las noches es su lugar de descanso, una habitación o espacio oscuro lejos de sus dueños, quienes pueden tener la puerta cerrada; el pánico y desconcierto pueden apoderarse de él. En esta situación, dormirá menos, sus jadeos serán constantes y su rendimiento menor.
¿Cómo calmar la agitación de un perro?
Al observar la causa de agitación del perro, puedes ayudarlo a relajarse. El primer paso es caricias, lograrán tranquilizarlo y ponerlo en calma ante el desconcierto. Al detectar la fuente, procura mantenerlo lejos del detonante. Prueba cambiar su cama de lugar; si no hay espacio para el peludito en la cama, coloca su colchón en una esquina de la habitación. Es casi seguro que su recuperación será tranquila y disminuirán los jadeos.
¿Cuándo preocuparse por la respiración de un perro?
Al notar que el lomito tiene un ritmo acelerado en su respiración sin hacer nada, toma el tiempo. Si el ritmo respiratorio rebasa las 40 inhalaciones por minuto, necesita una visita con el veterinario. De igual manera, si muestra dificultades para respirar o si su patrón es inusualmente alto sin realizar una actividad física, acude a la brevedad con el especialista.
Sin hacer nada de ejercicio, un perro puede estar cansado, incluso sin hacer ninguna actividad. Lo recomendable siempre es el apapacho y el cuidado; si se agita, es seguro que se calme. En épocas de calor, bríndale suficiente agua. Si tienes más inquietudes, acude al veterinario para confirmar por qué se comporta así. Síguenos en nuestra página de Facebook para más información.