Los perros son muy sensibles a los estímulos externos, tanto que podríamos afirmar que leen la mente para detectar cuando alguien se siente triste, enojado o feliz y modificar su comportamiento, algo incomprendido para nosotros. Estudios realizados por investigadores han determinado el entendimiento que tienen los caninos con las palabras, sobre todo con las acciones que les permiten juzgar y reaccionar si alguien tiene malas intenciones, les miente y es carente de su confianza.
El denominado "sexto sentido" se debe a su capacidad de interpretar las señales que muestran los humanos consciente o inconscientemente como sus actores, el tono de su voz incluso los olores que emiten, como cambios hormonales permitiéndoles procesar la información recibida y modificar su comportamiento a cómo te sientes, como si detectara lo que hay en nuestra mente.
Los animales se manejan más allá de la racionalidad mostrada por los humanos, guiándose principalmente por sus instintos gracias a la capacidad de identificar peligros por los cambios en el ambiente y su interpretación de las emociones humanas complejas, saltando la barrera del racionalismo y guiándose por factores que las personas pasan por alto.
¿Cómo sabe mi perro qué siento?
La Universidad Eötvös Loránd de Budapest reveló la capacidad canina no solo para atender órdenes simples, señalaron su capacidad de entender determinadas palabras y asociales mentalmente con objetos en un proceso similar al aprendizaje humano. Utilizaron un electroencefalograma para comprobar la teoría al medir la actividad cerebral en 18 perros durante la prueba que consistió en que su dueño nombraba un juguete conocido y luego mostraba fotos, algunas coincidían y otras no.
Los registros cerebrales mostraron patrones cuando el objeto dicho coincidía con la imagen, lo que apunta a una representación mental al escuchar el nombre. A su vez, mostró una mayor actividad cerebral en los perros que reconocían mejor los nombres, lo que indicó una mejor capacidad de aprender palabras.
Lilla Magyari, otra investigadora del estudio, señaló para la revista Current Biology donde fueron publicados los resultados, que las acciones de los perros van más allá de asociar órdenes con acciones, podrías ser capaces de comprender algunas palabras lo que comprueba una conexión más estrecha entre el lenguaje humano y la cognición animal, es decir, no lee tu mente, entiende las palabras expresadasa.
Akiko Takoaka investigadora de la Universidad de Rissho en Tokio, compartió los resultados de un estudio en que los perros son engañados en repetidas ocasiones. Luego ellos mostraron una indiferencia a las personas, una capacidad para detectar a quienes no son honestos. En este contexto, una prueba realizada en Finlandia evaluó y mostró cómo los lomitos se resisten a seguir las indicaciones de alguien cuando sospechas que los engaña.
La Universidad de Kyoto mostró que los perros actúan con otra persona dependiendo cómo se sienta su tutor, es decir, si una persona los trata mal, ellos los rechazarán aun si les ofrecen comida o un premio. La evaluación realizada existe también con la observación de las interacciones que enfrenta su dueño y juzgan el trato, aun cuando sean miembros de la familia, como si lograran leer sus intenciones.
Las pruebas con los perros han demostrado que su “capacidad de leer mentes” se atribuye a su compresión de las palabras y la interpretación de las acciones, reforzadas por los factores olfativos y visuales, así saber como te sientes y que podría pasar en las dinámicas sociales, con una clara protección a sus tutores.