Muchos tutores de gatos se han preguntado en alguna ocasión si su mascota les guarda rencor o, en el peor de los casos, si los odia. El comportamiento a menudo distante y solitario de estos felinos es la causa principal de que sus humanos se sientan inseguros acerca de la relación que tienen con ellos.
Sumado a lo anterior, debido a su personalidad, a veces parece que nuestro gato está molesto con nosotros, pero ¿es esto realmente posible? Algunos expertos afirman que los felinos no son capaces de “odiar” a sus tutores de la misma manera que los humanos lo hacen, pero sí pueden asociar comportamientos o experiencias negativas con ciertas personas o situaciones.
Según Cats Protection, una organización especializada en felinos, existe cierta controversia sobre si los mininos pueden sentir o expresar rencor. Mientras que algunos especialistas creen que lo que interpretamos como “resentimiento” es simplemente una forma en que los humanos proyectan emociones en los animales, otros señalan que si un gato pasa por una experiencia traumática, podría asociar esa situación con la persona que estuvo involucrada, lo que podría generar un rechazo o animosidad hacia ella.
Esto tarda en olvidar un gato
El tiempo que un gato tarda en olvidar o superar un episodio que lo haya molestado depende de la magnitud del trauma que haya experimentado. Si se trata de una situación pasajera, como una pequeña molestia o un susto breve, el animal podría parecer distante solo durante unas horas. En cuanto se sienta seguro nuevamente, volverá a su rutina y comportamiento habitual.
Sin embargo, si el incidente fue más grave o se repite con frecuencia, el pequeño peludo podría desarrollar una aversión hacia el individuo involucrado, y ese malestar podría durar mucho más tiempo, incluso de forma permanente. Para saber si tu gato guarda rencor o simplemente está molesto, es importante estar atento a cualquier cambio en su comportamiento.
Cats Protection recomienda observar aspectos como la tolerancia del gato hacia las personas a su alrededor, movimientos inusuales en su cola, o si sus orejas están más aplanadas de lo normal. Estos son signos que pueden indicar que el felino no se siente cómodo o está experimentando algún tipo de estrés o malestar.

¿Por qué los gatos son rencorosos?
Los gatos pueden sentirse irritados o molestos por diversos factores. Los cambios en su rutina diaria, la llegada de un nuevo animal a la casa o un ambiente más estresante pueden alterar su bienestar. En tales situaciones, el felino puede reaccionar de maneras que podrían interpretarse como “rencor“.
Comportamientos como arañar, distanciarse más de lo habitual, o incluso presentar problemas de salud, son señales de que el gato está lidiando con algo que le resulta incómodo. Sin embargo, estos episodios suelen ser el resultado de experiencias repetidas o intensas, no de algo aislado.
Cuando un trauma o malestar se repite de manera continua, el felino puede asociarlo con una persona o situación específica, desarrollando una aversión hacia ellos. En estos casos, el “rencor” puede no ser más que una forma de defensa del animal ante lo que percibe como una amenaza o fuente de estrés. Por eso es crucial observar su comportamiento y buscar formas de reducir las situaciones que lo incomoden, para mantener una relación armoniosa.

¿Cómo caerle bien a un gato?
Si quieres ganarte el cariño y la confianza de tu gato, lo primero es ser paciente. Los felinos son animales muy sensibles a su entorno, por lo que es esencial respetar su espacio y su tiempo. Evita forzar el contacto físico si el minino no lo busca, y asegúrate de proporcionarle un ambiente tranquilo y seguro. Los michis aprecian la consistencia y las rutinas, por lo que un entorno predecible y libre de cambios bruscos les ayudará a sentirse más relajados.
Además, el refuerzo positivo es una excelente estrategia para acercarte a tu gato. Premiarlo con golosinas o caricias cuando se comporta de manera tranquila y afectuosa hará que asocie tu presencia con algo positivo. Si te muestras atento a sus señales y respetas su necesidad de independencia, tu mascota aprenderá a confiar en ti y, eventualmente, se mostrará más cariñoso y receptivo a tu compañía.