GATOS

¿Cómo sé si mi gato tiene problemas en los riñones?

Es importante que, como tutor, estés atento a los síntomas de posibles afecciones renales en tu gato, para poder acudir al veterinario lo antes posible.
sábado, 11 de enero de 2025 · 13:14

Nuestros felinos son miembros queridos de la familia y su bienestar es nuestra principal prioridad. Sin embargo, a veces puede ser difícil detectar cuando nuestros gatos no están en buen estado, ya que son expertos en ocultar cualquier signo de debilidad. Una enfermedad bastante común en estos animales, especialmente a medida que envejecen, son los problemas renales, los cuales pueden ser graves si no se detectan y tratan a tiempo.

Los riñones filtran la sangre y eliminan las toxinas del cuerpo. Cuando estos órganos no funcionan correctamente, pueden acumularse sustancias dañinas en el organismo del gato, lo que puede llevar a una variedad de síntomas.  Aunque puede ser alarmante pensar en la posibilidad de que nuestra mascota tenga problemas renales, es importante estar informados sobre los signos más comunes para poder actuar rápidamente y buscar atención veterinaria.

En esta ocasión, exploraremos en detalle los problemas renales en felinos, sus causas, síntomas y cómo los veterinarios diagnostican y tratan esta afección. Aprenderemos a reconocer los signos de advertencia y a tomar las medidas necesarias para mantener a nuestros gatos felices y saludables durante toda su vida.

Síntomas de que tu gato tiene problemas en los riñones

Los síntomas que podrían indicar problemas en los riñones de tu gato incluyen:

  • Dificultad para orinar.
  • Orinar con dolor (lo cual puede manifestarse en maullidos agudos al estar en la caja de arena).
  • Lamerse constantemente la zona genital.
  • Sangre en la orina.
  • En algunos casos, mear fuera de la caja. 
  • También es posible que el gato no orine o lo haga en cantidades muy pequeñas tras hacer esfuerzos. 

Estos síntomas pueden ser signos de afecciones graves y deben ser tratados con rapidez, especialmente en los machos, que son más propensos a complicaciones. Si observas estos signos, es fundamental llevar a tu mascota al veterinario lo antes posible.

¿Cómo saber si mi gato tiene una falla renal?
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¿Por qué los gatos se enferman de los riñones?

Existen diversas causas que pueden llevar a que un felino desarrolle problemas en su tracto urinario y riñones. Una de las principales es la cistitis idiopática, que provoca una inflamación dolorosa de la vejiga. Esta inflamación puede hacer que se filtren proteínas y sangre en la orina, lo que, en algunos casos, puede llevar a una obstrucción de la uretra, especialmente en gatos machos. Este tipo de obstrucción puede ser muy grave e incluso poner en peligro la vida del animal.

Otra causa son los cálculos en la vejiga, que, aunque menos comunes, pueden presentarse en gatos y obstruir la uretra. Los tipos más frecuentes de cálculos son los de estruvita y oxalato de calcio. Las anomalías anatómicas también pueden ser responsables de trastornos urinarios, ya sea por condiciones congénitas o derivadas de traumatismos. Las infecciones bacterianas del tracto urinario son raras en felinos sanos, pero pueden ocurrir en animales con diabetes o problemas renales preexistentes.

¿Qué provoca el daño renal en gatos?
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Además, la edad, el sobrepeso y el estrés son factores que pueden influir en la salud urinaria de los gatos. Los felinos mayores y aquellos con sobrepeso son más propensos a sufrir de problemas urinarios. El estrés, causado por cambios en el hogar o situaciones de tensión, puede empeorar enfermedades como la cistitis idiopática.

¿Cuál es el tratamiento de los gatos con problemas urinarios?

Cuando un gato presenta dificultades para orinar, es crucial que el veterinario actúe rápidamente para evitar complicaciones graves. El tratamiento puede incluir sedación o anestesia general para permitir la inserción de un catéter urinario, lo cual desbloqueará la uretra y permitirá que la pipí fluya normalmente. 

Asimismo, en algunos casos, el gato podría necesitar líquidos intravenosos y otros medicamentos. Dependiendo de la causa del problema, puede ser necesario que el animal permanezca hospitalizado durante unos días.

¿Cómo curar a un gato con problemas urinarios?
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En el caso de los cálculos en la vejiga, el tratamiento puede implicar una intervención quirúrgica para extraerlos o un cambio en la dieta, según el tipo de cálculo presente. Si la causa es una infección bacteriana, se prescribirán antibióticos, aunque este origen es poco frecuente. Por otro lado, la cistitis idiopática, aunque compleja de tratar, requiere un enfoque integral que abarque varios aspectos:

  • Alivio del dolor.
  • Medicamentos específicos.
  • Reducción del estrés.
  • Ajustes en la dieta.

El tratamiento de los problemas urinarios en gatos requiere paciencia y un enfoque multidisciplinario. Además, es importante mantener un ambiente tranquilo para tu mascota y monitorear cualquier cambio en su comportamiento o salud. Consultar a un veterinario especializado en felinos es crucial para asegurar el mejor tratamiento posible para tu pequeño peludo.