Si tienes un perro, sabes que en cualquier momento está presente, más a la hora de comer. Te mira mientras espera que le des un poco de alimento y una opción que se te ocurre es la tortilla quemada que tienes a la mano. En una ocasión singular, puede salvar la vida de tu lomito, pero dársela como parte de su alimentación le puede causar problemas.
Si te quedaba duda, puedes darle tortilla a un perro en pequeñas cantidades debido a que el maíz o la harina de trigo no son tóxicas y aportan beneficios nutricionales como proteínas, vitaminas y minerales como la A, hierro y selenio. En el aspecto negativo, poseen una alta cantidad de carbohidratos, grasas y sodio que puede ser perjudicial para el canino.
La tortilla quemada puede salvar la vida de tu mascota si sufrió una intoxicación o envenenamiento. Para que sea efectivo, mézclala con agua hasta conseguir una pasta que debes introducir en su hocico. El contenido de carbón actuará como una esponja al absorber las toxinas.
Lo que le pasa a tu perro si le das una tortilla quemada
Haciendo a un lado el remedio casero para evitar la intoxicación de un canino, los expertos en salud animal no recomiendan darle una tortilla quemada como parte de su alimentación, debido a los problemas que puede causar una vez que ingresa a su organismo.
- Problemas digestivos: una tortilla quemada puede ser difícil de ingerir y, en caso de llegar al estómago, puede causar malestar estomacal, diarrea, vómitos y otros problemas digestivos.
- Asfixia: el alimento quemado puede ser duro y contener pedazos afilados que representan un riesgo para tu perro, pueden causar asfixia si se ingiere rápido y los pedazos son pequeños.
- Carente de nutrientes: una tortilla quemada ya no posee las vitaminas, minerales y los nutrientes que normalmente tienen un estado ideal; no le proporcionará ningún aporte.
- Toxinas: depende de qué manera se haya quemado el alimento, puede contener toxinas perjudiciales para el canino.
En lugar de darle una tortilla quemada como parte de su alimentación, hay otras opciones que resultan más fáciles de ingerir y sobre todo más saludables para asegurar su bienestar, como frutas y verduras, carne magra cocida de pavo o pollo, e incluso arroz integral.
¿Qué alimentos están prohibidos para un perro?
Antes de brindarle cualquier alimento al perro, ya sea de tu plato o tu despensa, debes asegurarte que no es tóxico, ya que si es ingerido podría causar malestares estomacales o hasta requerir una visita al veterinario. Entre los que debes evitar se encuentran:
- Aguacate
- Hongos
- Tomate verde crudo
- Semillas y huesos de fruta
- Cafeína
- Alcohol
- Ajo y cebolla
Si estás comiendo y tu perro se acerca para que le brindes algún alimento, no contemples una tortilla quemada para que coma, es mejor dejarlo con hambre en el momento y brindarle un alimento que aporte proteínas y nutrientes y no ponga en riesgo su salud.