Los gatos pueden ser animales algo quisquillosos, esto se debe a que si algo no les gusta lo más probable es que lo ignoren. Con la comida puede pasar algo similar, a diferencia de lo que sucede con otras mascotas como los perros, pues estos últimos podrían ingerir casi cualquier cosa que les des sin siquiera pensarlo.
Como los michis son muy distintos y pueden tener preferencias hacia ciertos alimentos, además de solo comer cuando tienen hambre, es probable que sea más difícil que consuman lo que les das. Si te has preguntado cuál es la razón de que tu gato solo huela sus croquetas, pero no se las coma, entonces has llegado al lugar indicado.
Expertos veterinarios y con conocimientos en bienestar animal revelaron las principales causas de que los gatos no se coman su comida y que, solo la huelan y parezcan analizarla pero decidan ni si quiera meterla a su boca, así como las posibles soluciones que podemos encontrar ante esta problemática, de la mano de los mejores consejos para los cuidados de los michis.
Razones por las que un gato huele la comida y no la come
- No le gusta su comida: Esta parece la razón más obvia y lo es, sucede cuando a nuestro michi le cambiamos el alimento por uno nuevo y desconocido, lo más probable es que lo rechace por estar acostumbrado a la comida anterior.
- No le gusta la ubicación del comedero: Para que un gato disfrute de su comida es necesario que su comedero se encuentre limpio y colocado en un espacio tranquilo.
- Tiene malestar estomacal: Algunos mininos pueden dejar de comer de un momento a otro si sienten malestares gastrointestinales, que pueden ser generados por bolas de pelo en su estómago.
- Estrés: Esta es otra de las razones más comunes por las que un michi deja de comer.
- Dolores en la boca, en los dientes u otros malestares.
- Pérdida de apetito debido a enfermedades.
- Está en celo.
¿Qué hacer para que mi gato vuelva a comer su comida?
Lo primero que debes hacer es identificar cuáles son los motivos por los que tu gato ha dejado de comer, en caso de que sospeches que se trata de algún padecimiento estomacal o una enfermedad más seria, es necesario que lo lleves a una consulta con el veterinario para que pueda darle el diagnóstico y el tratamiento adecuado.
Si se trata de razones más simples, puedes comenzar con hacer un cambio gradual en las croquetas de tu gato, para que así no sienta tan drástica la diferencia entre sus comidas, también coloca el comedor en un lugar tranquilo, libre de otros animales o de situaciones que le creen estrés al michi, además de que deberás mantener su traste limpio y sus croquetas deben ser servidas en pequeñas raciones a lo largo de todo el día.