En las vacaciones de Semana Santa muchos ya corrieron a reservar sus boletos, pues tienen planeado recorrer los mejores lugares de México para empaparse un poquito de la cultura, pero no lo harán solos, ya que a su lado van acompañados del mejor amigo del hombre. Sin embargo, ¿ya te preguntaste si es posible viajar a la playa con un gato? ¿Qué pasa cuando te lo llevas a un lugar caluroso como este?
Sí, es fácil viajar con los perros por lo fácil que resultan de ser manejables, pero con un gato la historia es distinta. Mientras te explicamos lo que podría pasarle a tu michito, te recordamos que, si tienes un perro en casa, puedes darla agua fresca con uno o dos hielos para que no sufra por un golpe de calor y no permitas por ningún motivo que ninguno beba agua de mar.
Las consecuencias de esto podría resultar graves para el bienestar de tus mascotas e intenta no sacarlos cuando el sol, la razón de esto la puedes encontrar en la nota que hicimos abordando la cuestión y que puedes encontrar en este sitio.
Te podría interesar
Las consecuencias de llevar a tu gato de vacaciones a la playa
1. Estrés por el cambio
Los gatos siempre se refugian en lugares que conocen a la perfección ante cualquier momento de tensión en su vida, por lo que es perfectamente normal que ande de curioso cuando has decidido cambiar de lugar los muebles de la casa. Además, seguramente tu gato se pondrá nervioso si decides sacarlo de su lugar seguro para ir a la playa, un lugar que posiblemente nunca conoció en su vida.
Para evitar que el cambio sea brusco, lo puedes llevar en su jaula con sus mejores juguetes y colocar sus cosas en un lugar que podrá reconocer fácilmente.
2. Caída de pelo
Lo que pasa de estar en un lugar que desconoce totalmente es que el nerviosismo provoque una caída de pelo, lo cual le sucede también a los perros. Además, no es recomendable que expongas a tu gato a los momentos más calurosos del día porque esto hará que se le caiga aún más rápido. Debes prestar mucha atención a este factor y cepillarle de igual forma su pelaje para retirar el pelo muerto.
3. Puede sufrir quemaduras
Otra de las consecuencias que puede vivir tu gato si lo llevas a la playa es que va a sufrir quemaduras y el grado de estas dependerá de la exposición que tuvo al sol. Aunque no lo creas, los gatos y los perros pueden sufrir quemaduras y les afecta más a los que tienen el pelaje blanco, corto y fino; el doctor podría estar diagnosticando una dermatitis solar o cáncer de piel si no se cuidó su exposición de manera correcta.
¿Cómo salir de vacaciones con mi gato?
Ya sabes lo que pasa si llevas a tu gato de vacaciones a la playa, así que llegó el turno de qué sepas, cómo será el proceso de transportarlo. En primer lugar, acudirás al médico para que sepas si tiene algún problema de salud que le impida que viaje, después comenzarás a buscar los mejores lugares que permitan una reservación con Bigotes.
Si viajarás en avión deberás ponerte en contacto con la aerolínea para saber los requisitos de viajar con un gato y si lo harás en carro solo debes tener la jaula indicada para que quepa detrás de los asientos, ya que es el mejor lugar para evitar los movimientos bruscos. Además, nunca lo sacarás de su jaula, pues puede volverse totalmente incontrolable.
Tampoco le darás de comer y le darás agua con un dispensador especial o con una jeringa sin aguja. Cuando lleguen a su destino, puedes dejar a tu gato en el baño con todas sus cosas, dejar abierta la jaula y esperar a que se calme para que lentamente vaya reconociendo los alrededores.
Esperamos que esta nota te haya sido de utilidad para tu siguiente viaje a la playa con tu gato y tengas muy presente lo que pasa. En nuestra cuenta de Facebook tenemos muchas notas como estas.