El mal aliento suele ser un problema muy bochornoso para los humanos, pero en la mayoría de los casos, basta con lavarnos la boca o echarnos una mentita. Pero, ¿qué pasa cuando a un gato le huele mal la boca?, ¿cómo le hacemos para ayudarlo con ese asunto y por qué les ocurre?
Los gatos pueden llegar a presentar diversos problemas de salud, y aunque no tienen la capacidad de decirnos aquellas cosas que les duelen o que se sienten mal con palabras, sí pueden expresarnos qué sienten con su lenguaje corporal o podemos notarlo mediante ciertas actitudes.
Por tales motivos, es necesario que como dueños responsables de gatos, estemos atentos a cualquier cambio en el comportamiento de nuestra mascota, por ejemplo el mal aliento, que puede indicar problemas de salud más graves.
¿Por qué le huele mal el aliento a mi gato?
Uno de los motivos más comunes por los cuales le huele mal la boca a un gato es, como con los humanos, una deficiente higiene bucal, pero también se puede deber a una mala alimentación y a una falta de consumo de agua. Estos son los motivos más comunes y también los menos graves por los cuales le huele mal la boca a un gato y se pueden corregir al realizar cambios en los hábitos de nuestra mascota.
Por otra parte, también es posible que a un gato le huela mal la boca por razones de preocupación, como las enfermedades, entre las cuales se encuentran la gingivitis, la estomatitis, la periodontal, la diabetes o enfermedades renales. En estos casos los gatos también pueden tener problemas de peso, falta de apetito, mal aspecto, caída de pelo o problemas de incontinencia.
¿Qué hacer si a tu gato le huele mal la boca?
Como lo mencionamos, cada problema tiene su solución específica. Si has identificado acumulación de sarro puedes realizar una limpieza dental mínimo dos veces por semana, siempre usando productos específicos para minino. Si a pesar de esto, el aliento de tu mascota no mejora, tal vez sea un problema de alimentación o falta de hidratación, así que bríndale más agua y prueba a cambiar su dieta, pero haz esto último siempre con la guía de un veterinario para evitar otro tipo de problemas.
Finalmente, y de manera más importante, es posible que a tu gato le huela mal la boca por problemas de salud; en este caso es de vital importancia que acudas a un veterinario para que te oriente y te ayude a descubrir qué tiene tu mascota, ya que sólo ellos están facultados para realizar estas importantes tareas.
¿Cómo limpiar los dientes de mi gato de forma casera?
Suele ser bueno acudir al veterinario para que realice una limpieza dental de nuestros gatos, pero en caso de querer hacerlo en casa, habrá que tener mucho cuidado. Para realizarlo, se tendrá que usar cepillos de dientes especiales para mascota, así como pastas de dientes seguras y específicamente fabricadas para ellos.
Se tendrá que realizar en ambientes y en momentos donde el gato se encuentre tranquilo y se sienta seguro. Habrá que poner al gato en el regazo y levantar sus diente. La limpieza tendrá que ser con movimientos similares a como se hacen con un humano, pero poniendo especial atención a los dientes caninos y a los molares superiores, pues ahí es donde más sarro se acumula.
Puede suceder que el gato no se deje limpiar los dientes, pues no están acostumbrados a que alguien toque su boca y la quiera manipular de una forma que ellos pueden interpretar como invasiva. En esos casos, lo más recomendable es sí acudir al veterinario o brindarle snacks especiales para limpieza dental, que suelen también vender en las veterinarias.
Pero bueno, ahora ya sabes por qué a un gato le huele mal la boca y qué medidas puedes tomar para mejorar su aliento. Esperamos que este artículo te haya sido de mucha utilidad y no olvides seguirnos en Facebook para más información sobre mascotas.