6 señales para reconocer que tu gato ya está viejo

'¿Cómo podré saber si mi gato ya está viejo?', se preguntan la mayoría, incluida yo, pese a que demuestra tener vitalidad, ¿en qué momento se debe de prestar atención a su cuerpo para poder comenzar a realizar unos cuidados adecuados para su edad? En PetLife te ayudaremos a que puedas reconocer los síntomas y señales de un gato que se encuentra sumamente viejo o que está en el proceso de envejecimiento. 

Podrá parecer complicado en un inicio, ya que la mayor parte de su tiempo se encuentra durmiendo, pero en realidad, las señales sí existen. Sin embargo, no temas, que si no ha pasado los años de vida, todavía es un gatito joven; para que llegue a ser viejo deberán de pasar diez años, porque en promedio puede vivir 15.

Sus años de vida podrían variar mucho en cada caso, ya que la alimentación, actividad física y citas con el médico pueden variar. Incluso la raza, los genes y las condiciones patológicas que padezca pueden influir en su esperanza de vida. Lo mejor que se puede hacer es que todo sea a medida para su propio organismo.

¿Cómo me doy cuenta si un gato es viejo? 

Aunque, si se desea evitar el envejecimiento en un felino, lo que se debe hacer es realizar mucho ejercicio, tampoco decimos que vayas y lo despiertes en este momento, solo invítalo a jugar cuando se encuentre despierto. De esta forma mantendrá sus articulaciones y músculos en perfectas condiciones.

1. Falta de alimentación

La primera de las señales o síntomas a identificar en un gato con envejecimiento es la falta de apetito, ¿por qué? Porque sus sentidos ya no serán tan agudos como los solía tener, por lo que le será complicado en un inicio el reconocer cuando la comida ya esté en su plato, o reconocer que es comida en un inicio.

2. Problemas dentales

Los dientes son huesos, huesos que se deben de cuidar en todo momento para poder comer, pero el calcio se desgasta con el tiempo, en especial cuando se es viejo, por lo que aparecerá sarro, caries y más bacterias que debilitarán su dentadura. En este punto su alimentación ya debería de ser otra para evitar molestias.

3. Articulaciones menos flexibles

Sí, un gato puede llegar a ser menos ágiles porque sus articulaciones se desgastan, como mencionamos, sus huesos se vuelven débiles, por lo que no podrán brincar de un lado a otro. Como consecuencia, se deberá de acondicionar todo a un lugar en el que se sienta cómodo.

4. Problemas de comportamiento

Como su organismo está cambiando por completo, sus etapas y ciclos de sueño lo harán también. Es probable que duerma más de la cuenta, pero que no lo haga profundamente y que se presente huraño por momentos. Incluso puede llegar a tener problemas de comportamiento ante esta inestabilidad.

5. Más serios y tranquilos

Como ya no se pueden mover como antes, se volverán mucho más tranquilos, pero podrían llegar a realizar sonidos extraños en momentos tranquilos. También podrán llegar a aparecer muy desorientado en la casa.

6. Falta de calidad en su pelaje

Por último, y no menos importante, un gato que ya es viejo podrá llegar a mostrar señales como caída de pelo, que esté ralo y que no tenga la misma sedosidad que solía tener. A su organismo ya le cuesta trabajo producir los aceites esenciales para mantener su piel hidratada como antes.

¿Cómo tratar a un gato viejo?

Lo que se debe de hacer cuando un gato se encuentra viejo es intentar colocar todos sus enseres (su cama, su comida y su arenero) en una sola instancia. Pueden estar separados, pero que se encuentren a una altura fácil de llegar, así no se lastimará las articulaciones ni se lesionará por accidente.

Se deberá de tener mucha limpieza con su cuerpo porque también llegará a tener problemas urinarios. Tampoco faltará un aseo constante en la zona de sus ojos, sus orejas, encías y sus garras, y todos los movimientos se realizarán con mucho cuidado para evitar lastimarlo.

Esperamos que puedas ayudar a tu gato viejo al reconocer estas señales y síntomas, si desea saber más sobre el envejecimiento, recuerda que siempre puedes revisar todo nuestro contenido informativo en Facebook y acudir al veterinario para chequeos médicos.