Los gallos son animales domésticos que destacan por la belleza de su plumaje con orgullo y elegancia. Un penacho brillante y sano refleja una buena calidad de vida y una salud óptima; sin embargo, hay factores que pueden causar problemas en sus plumas y hacer lucir a tu mascota enferma.
Los especialistas señalan que los gallos son animales muy sensibles que pueden experimentar emociones como la alegría, la tristeza y el miedo. Es importante tratarlos con respeto para evitar que padezcan estrés innecesario. En caso de padecerlo, notarás sus plumas erizadas, aleteos excesivos y vocalizaciones inusuales. Toma medidas para reducir los niveles de preocupación y tener un ambiente más tranquilo.
Estas complicaciones pueden repercutir significativamente en su salud y sobre todo en su esperanza de vida que, de acuerdo con expertos, va de los 5 a 8 años en promedio. Si tienen buenos cuidados, pueden cumplir entre los 10 y los 12 años. Para asegurar que goce de una excelente salud, sigue estas recomendaciones para cuidar sus plumas y su hábitat.
La mejor manera de cuidar las plumas de mi gallo
Los colores de penacho diferencian a los gallos de las gallinas, aunque ambos cambian de plumas en el otoño. El ave se ve brillante y reluciente, lo que indica una buena salud que debe ser procurada con estas indicaciones.

- Alimentación: para asegurar que la calidad y el brillo de sus plumas se mantengan, añade semillas de girasol y soya en su dieta. Durante los meses de muda proporciona un mayor aporte de proteínas y grasas. Algunos especialistas recomiendan el complemento vitamínico b12 500 mediante una inyección.
- Hábitat: se recomienda separar a los gallos de las gallinas, principalmente en la etapa de muda, para evitar que se puedan dañar. Cada espacio debe contar con espacio suficiente para el movimiento y un lugar donde comer y descansar a gusto.
- Época de apareamiento: expertos señalan que se debe evitar el apareamiento del ave en la temporada de cambio de pluma debido a que podría afectar la salud del nuevo plumaje tanto en el gallo como en la gallina. Señalan que puede ser complicado, pero es necesario para asegurar su cuidado.
- Evitar el contacto: al tenerlo como mascota, seguramente querrás tocarlo, pero debes evitar hacerlo en las primeras etapas con las plumas nuevas debido a que son débiles y pueden afectar su correcto crecimiento.

¿Cómo cuidar a un gallo en casa?
Contrario a la creencia popular, un gallo como mascota puede ser muy cariñoso y amistoso si se le cría con cariño y respeto, al grado de vivir incluso en un departamento. Para asegurar su bienestar, la alimentación debe estar fundamentada en plantas e insectos, al igual que agua fresca y limpia. Se señala que no es preciso tener una jaula debido a que están acostumbrados a deambular libremente.
En los periodos de muda, el penacho de un gallo es sensible y debe recibir un cuidado especial. De seguir estos consejos, notarás que tiene un plumaje bello y lleno de color.