Entre los perros y los gatos existe una fuerte leyenda de que no se llevaban para nada bien. Los canes tienden a perseguir a los felinos, pero esto no sucede en varios casos, como, por ejemplo, cuando se vuelven mejores amigos. Así que, ¿qué significa cuando vemos a un perro lamer a un gato bebé? ¿Es normal que lo haga?
Los perros y los gatos son depredadores naturales de diferentes especies, así que es completamente normal que se rechacen mutuamente cuando se encuentran. Si estas dos especies no se han presentador correctamente y con la presencia de un experto, con más razón tendrán roces, pero a veces podemos ver que un perro queda a cargo de un gato bebé.
Y la razón más sencilla de explicar por qué un perro llega a lamer a un gato bebé es porque el lomito fue socializado correctamente con otros animales o personas. Es posible que haya conocido a otros felinos bebés y que le instruyeran correctamente cuando conoció uno. Es posible también que el ambiente de su hogar sea tranquilo, pero aun existen muchas razones de por qué hace esto.
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La razón por la que tu perro lame a tu gato bebé
Como mencionamos anteriormente, un perro puede lamer a un gato bebé cuando este tuvo una buena socialización y pudo convivir en varias oportunidades con otras especies de animales. Además, es muy probable que se diera cuenta de que el felino es un cachorro, por lo que aplicará lo que sabe hacer desde la camada, lamerlo para limpiar la suciedad de su cuerpo.
Pese a que sean de especies diferentes, este comportamiento de limpiarse con la lengua lo presentan ambos y lo pueden replicar sin ningún problema. También pueden llegar a hacer esto cuando se encuentran tranquilos, han aceptado la compañía del otro y se consideran parte de una manada, incluso lo podrá lo hará cuando se encuentre de buen humor.
Es posible que el perro se encuentre de buen humor y quiera enseñar al gato bebé a jugar con él, y lo hará con pequeñas lamidas, aunque eso no descarta que posiblemente lo aprendió de manera indirecta si sus humanos le dan premios para reforzar su buen comportamiento. En cualquier caso, no es malo que un perro lama a un gato bebé, a menos de que lo haga con intensidad y provoque irritación en la piel.
¿Cómo cuidar a un gato bebé?
No es fácil cuidar a un gato bebé, ya que no pueden alimentarse por su propia cuenta. Así que tendrás que dejarlos con su madre durante las primeras semanas para que les de comida, los bañe, los mantenga caliente y aprenda cómo debe de comportarse como felino. Aun así, estarás presente para vigilar que se encuentren bien haciendo lo siguiente:
- Revisa que la cama este caliente y que la zona de descanso esté tranquila.
- Dales de comer alimento cuando dejen de comer de la madre, pero acudirás también al veterinario para saber qué tipo de alimento le darás.
- Vigila el peso de los recién nacidos.
- Puedes darle pequeños y delicadas palmadas en la espalda para que eructen.
- Limpia sus mantas donde descansan, es posible que no alcancen a llegar al arenero.
- Evita tocarlos si la mamá no quiere, su instinto protector puede aumentar en esta etapa.
Es importante que acudas al veterinario incluso cuando la mama está embarazada o si lo encontraste recién nacido en la calle, porque necesitará rápidamente una revisión médica. Ahora ya entiendes por qué un perro llega a lamer a un gato bebé, basta con observar la intensidad con la que lo hace.