El disfraz poco elaborado que usó una niña fue suficiente para generar una gran desconfianza en su gato. Posiblemente, pensó que se trataba de uno muy grande, con cierta cautela y sin movimientos bruscos, se puso en guardia. El momento ya es viral en redes sociales y muestra la reacción que tienen las mascotas al ver a otro invadir su espacio, sobre todo con esas dimensiones.
En otros videos existentes en TikTok comprobamos la territorialidad de los gatos contra otros, lo que dificulta ingresar a un nuevo miembro al hogar. El instinto de rechazo también es mostrado con mascotas que se miran al espejo y “tiran pleito” a su contraparte, incluso cuando un muñeco o un peluche con una apariencia amenazadora incursiona en su espacio personal.
La madre de la niña la disfrazó de un tierno gatito, pero ninguna de las dos esperaba que la mascota reaccionara con sorpresa y miedo al ver un felino de tales dimensiones. Seguramente cegado por la adrenalina, no cayó en cuenta de que se trataba de su pequeña dueña. El vídeo viral generó divertidos comentarios en la red social con más de 200 mil reproducciones y cientos de comentarios.
Así reaccionó un gato cuando vio a su dueña disfrazarse como él
Desde que inicia el video, se le ve encima de un mueble encogido casi sobre sus cuartos traseros, con una gran desconfianza en los ojos, agazapado por la increíble visión de un grato enorme. Se escucha decir a la mujer: “¿Qué pasa, Katy? Es Alma, mira”, en un intento que reconozca a la niña y se relaje; sin embargo, se mantiene agazapado como si se tratara de un gato invasor.
La pequeña, identificada como Alma, porta un suéter color naranja con una línea blanca acompañado por una diadema forrada del mismo color con dos orejas felinas. Para terminar, tiene pintada de negro la punta de la nariz y un par de bigotes cerca de la boca, un disfraz sencillo pero impactante para su mascota.
Durante un momento no reconoce la risa de la niña y la mira con desconfianza, pero cuando escucha su timbre de voz se le ve más relajada, aunque sin apartar la vista, desciende con cautela por el lado contrario, apoyando sus patas en una silla para llegar hasta el piso. Ya más tranquila, se esconde bajo la mesa, pero responde a la llamada de la pequeña que mueve sus dedos y la felina llega a comprobar su aroma y cerciorarse que se trata de su pequeña dueña solo con un disfraz.
“Gato naranja + gigante = peligroso²”, “Katy: identifícate”, “Katy conoció el terror ese día”, “La niña: somos amigos, el gato: ¿quién lo decidió?”, son algunos comentarios graciosos compartidos por los internautas. Entre ellos relataron que con pequeños cambios, como ponerse una diadema, dejarse el fleco o usar aretes, su mascota tiene esa misma reacción, incluso cambiarle el collar a otro habitante de la casa genera la misma desconfianza.
El felino del video vio aproximarse algo parecido a una mascota naranja gigante y rápidamente adoptó una postura defensiva sin percatarse que se trataba de su dueña hasta que habló y se sintió fuera de peligro, lo que habla del rechazo que puede mostrar un gato cuando otro entra en su territorio sin avisarle y el gran trabajo que hizo la mamá con el disfraz de la niña.