Una mujer intentó ayudar a que mejorara su mascota que había adoptado poco tiempo antes, pero sin un diagnóstico claro ni mejoría, le indicaron que era mejor sacrificarla. Con el dolor de su corazón, dejó al perro y asumió que estaba en un mejor lugar, pero un año después se enteró de que estaba vivo y de nuevo en adopción. ¿Qué ocurrió?
Kristie Pereira es una mujer que vive en Maryland, Estados Unidos que decidió adoptar a un perro en un refugio local de nombre Lost Dog & Cat Rescue Foundation (LDCRF), ahí conoció y se enamoró de Beau un sabueso que rápidamente se volvió su fiel compañero, tanto que hacían todo juntos, así lo relató a Associated Press (AP).
El problema que desencadenó la historia de su mascota se dio a pocos meses de unir sus vidas, ya que el perro mostraba un deteriorado estado de salud. Pereira lo llevó a revisión médica y se concluyó que tenía una afectación neurológica, mientras los análisis de sangre mostraron problemas hepáticos. Tras diversos tratamientos sin éxito y una enorme cuenta, se le recomendó que la mascota fuera sacrificada.
La historia de una mujer que entregó a su mascota para que sea sacrificada
La mujer, quien había gastado más de 12 mil dólares en estudios, medicina y tratamientos para Beau, admitió que hubiera encontrado la forma de reunir el dinero si recuperaba su salud, pero el diagnóstico indicaba las bajas posibilidades de encontrar que estaba mal. Con esto en mente, extendieron una carta para sacrificarlo, le tomó un mes tomar la decisión a Pereira.
Contó al medio local Fox 5 que se presentó en el refugio con la carta que señalaba el mal estado de la mascota y debía ser sacrificada. La mujer no pudo permanecer en la sala por las políticas del lugar y se retiró sin saber que los veterinarios hicieron su propia evaluación y determinaron que la afección del perro era tratable.
Los cuidadores del perro determinaron que se trataba de una lesión hepática que fue solucionada gracias a una cirugía, de acuerdo con la declaración de la portavoz Chloe Floyd. Posteriormente, regresó al albergue en busca de una nueva familia. Mientras esto ocurría, nadie le notificó a la mujer sobre la nueva situación con el perro.
¿Qué hizo tras encontrar a su mascota en adopción?
Al enterarse de que su perro estaba en adopción, Kristie Pereira llamó al centro de rescate, pero no tuvo una respuesta favorable. Señaló que quien la atendió le faltó al respeto y la hizo sentir mal al señalar que ella lo abandonó y lo dejó morir sin preocuparse por él. A pesar de ser su antigua dueña y estar vivo, no puede regresar a su casa.
La portavoz Chloe Floyd dejó en claro que LDCRF no realoja en su antiguo hogar a perros que han sido entregados por el adoptante, dado que su objetivo es salvar a los perros de la eutanasia.
El caso de la mujer y la mascota que logró ser salvada resulta controversial, así lo señaló Caroline Hairfield. Todos sienten algo por ella, pero la decisión de readoptarlo depende enteramente del LDCRF.