Cuando un perro rechaza las croquetas que le damos en su plato o simplemente las ignora y no las quiere comer, pero aún así , si le ofrecemos comida humana, lo podemos llegar a llamar “mañoso”, sin embargo, su comportamiento suele tener una explicación que nos ayudará a corregirlo.

Desde caprichoso hasta melindroso, así es como se suele llamar a los perros que rechazan croquetas, pero sí comen alimentos humanos, es decir, aquellos cocinados o hechos especialmente para las personas; y aunque a algunos les parezca hasta chistoso, no se trata de una práctica sostenible a largo plazo para la salud de nuestras mascotas.

Lo anterior está fundamentado en que las croquetas para perro están formuladas especialmente para brindarles todos los nutrientes que necesitan en su día a día, como proteínas, grasas, fibras, carbohidratos y vitaminas y minerales específicos para su salud.

Por esto tu perro no come croquetas pero comida sí

Una de las causas más comunes por las cuales un perro rechaza las croquetas, es porque se le ha dado demasiada comida humana y, debido a que contiene ingredientes diferentes, suele ser más apetitosa y palatable; sin embargo, no porque sea más sabrosa significa que sea más saludable.

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En algunos hogares las personas le dan de su propia comida a sus perros, lo cual, a la larga, hace que se vayan acostumbrando a los estímulos recibidos, pues obtienen atención de sus dueños y un bocadillo delicioso, de esta forma, la ingesta de croquetas podría verse disminuida al no quererla.

Por otra parte, también podría existir un problema con las croquetas, ya sea que son de baja calidad y no le aportan nada, nutrimentalmente hablando, o porque no les agrada ni el sabor ni la consistencia.

¿Qué hacer si un perro no quiere croquetas pero sí comida humana?

Lo que debes hacer es aplicar el adiestramiento positivo para que el perro comprenda que las croquetas que tú le sirves son la única fuente de nutrición que obtendrá. De esta forma, tienes que evitar completamente servirle comida humana y realizar lo siguiente:

  • Deja las croquetas en el comedero durante un tiempo determinado, y si no las come, quítalas; el tiempo puede ser entre 30 a 50 minutos.
  • Vuelve a servir las croquetas, cuando toque la siguiente ración, y sigue el método anterior.
  • Si sigues este método constantemente, tu perro comprenderá que esas croquetas son lo único que recibirá de tu parte.
  • Como ayuda extra, puedes no comer enfrente de tu perro.

¿Por qué mi perro no come de su plato pero sí de mi mano?

Finalmente, otro de esos comportamientos relacionados con la alimentación de los perros tiene que ver con que rechacen comer las croquetas en su plato pero que sí les guste comer de la mano de su dueño, y usualmente tiene que ver con que les gusta recibir atención de esas personas.

Adicionalmente, también podría ocurrir que hay algo mal con el comedero, por ejemplo, podría estar sucio, mal ubicado, ser muy pequeño o ser incómodo, así que prueba a hacer cambios para ver si esta es la razón.

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Pero bueno, ahora ya sabes por qué un perro no quiere comer croquetas pero sí comida humana; si el problema persiste, te recomendamos acudir con un veterinario para descubrir qué es lo que está pasando exactamente con tu mascota.