Un perro que fue rescatado de una situación de hacinamiento se ha convertido en una fuente de inspiración para estudiantes y la población en general por su historia de resiliencia y esfuerzo al sobrevivir viviendo sordo y ciego. La historia de Piglet merece ser contada para mostrar de lo que es capaz un ser vivo cuando se tiene el deseo de vivir y seguir adelante.
El canino es una mezcla entre un chihuahua y un perro salchicha que fue rescatado y llevado a una casa temporal de acogida con el fin de buscarle un hogar permanente, tarea que era complicada por la falta de vista y oído, pero la veterinaria que le abrió su casa también le abrió su corazón y decidió que ese sería su lugar de ahora en adelante.
La historia de Piglet fue compartida por la nueva tutora, quien recibía mensajes de apoyo, entre ellos el de una maestra de Massachusetts quien planteó utilizar el material para enseñar a sus alumnos sobre “mentalidad de crecimiento” donde creó un plan de estudio centrado en la actitud positiva y la superación de obstáculos: así nació Piglet Mindset.
El perrito Piglet que es sordo, ciego y tierno
La veterinaria Melissa Shapiro contó a la revista People que al principio compartió publicaciones en Facebook, las cuales hablaban de Piglet y su proceso, donde diariamente recibía mensajes de apoyo y deseos positivos en el viaje de superación que enfrentaba el perro. En la sección de preguntas compartió cómo, a pesar de ser ciego y sordo, tenía más desarrollado el olfato, el tacto y el gusto que le permitían conocer el mundo.

Con el impulso, la aceptación y el cariño que ganó en redes, lanzó un proyecto para concientizar a las personas de la inclusión y la resiliencia llamado Piglet Mindset, que tiene como objetivo enfatizar los valores de inclusión, empatía y apoyo hacia las personas y animales, principalmente aquellos que tienen necesidades especiales.
¿Cuál es la historia de Piglet?
La historia del resiliente perro tiene origen en la ciudad de Georgia, Estados Unidos, donde enfrentaba una situación de hacinamiento a lado de sus tres hermanos y su madre. Su vida cambió cuando fue rescatado, pero había un problema. Los cuidadores notaron que tenía una deficiencia visual y auditiva al no responder correctamente las señales que le daban.
En busca de un mejor futuro y atención centrada, los miembros del centro de rescate tomaron la decisión de enviar al canino a una casa de acogida mientras recuperaba sus fuerzas y energía, debido a que al ser encontrado apenas pesaba medio kilo.
La veterinaria de profesión, Melissa Shapiro, le abrió las puertas luego de que un compañero solicitara su ayuda para cuidar al perro sordo y ciego. Contó que el plan original era ayudarlo para conseguir un hogar permanente, no obstante, surgió un cariño tan fuerte que se enamoró de Piglet y decidió adoptarlo formalmente a los dos meses.

Piglet se tuvo que enfrentar a sobrevivir en el mundo ciego y sordo, pero al ser rescatado, su vida cambió, aún más al llegar a los amorosos brazos de Melissa Shapiro. Actualmente, su historia es un ejemplo de superación, valentía y resiliencia ante las adversidades.